AÑO
sep./dic. 2015
LUGAR
Ciudad de Ica, Perú
Cliente
Alberto Benavides Ganoza

Regeneración Urbana de la ciudad de Ica (Perú)

RESPONSABLES
Jaime Baladrón Laborda y Daniel Brenis Zakimi

Este proyecto propone la regeneración urbana de la ciudad de Ica, a través de la creación de una nueva red de ciclovías y de autobús público urbano, que conecten los principales nodos de actividad y equipamientos de la ciudad. Cabe destacar que la vía ciclista une además Ica con el cercano Oasis de la Huacachina, uno de los puntos turísticos de mayor interés de la zona. También se proponen nuevas paradas de bus metropolitano, para conectar el núcleo urbano con la capital: Lima, y con otras poblaciones importantes de la Región de Ica.

El segundo elemento fundamental en el que se propone intervenir es en el espacio público, a partir de una serie de calles que se deberán peatonalizar, en el casco antiguo de la ciudad, y un gran parque verde urbano que discurrirá paralelo al río Ica. En este parque se propone la creación de una serie de montículos, así como un escalonamiento conformado por gaviones rellenos de cantos rodados orgánico, que mantendrán la estabilidad del talud fluvial, manteniendo además la vegetación autóctona de ribera y promoviendo la conservación de la biodiversidad local.

En el río se establecen también terrazas de mayores dimensiones, de manera que se puedan aprovechar durante el periodo de sequía (que dura alrededor de 9 meses), junto con la propia cuenca fluvial, para poder generar cultivos de concesión municipal, así como huertos urbanos autogestionados por los vecinos y agricultores locales, que podrán aprovechar el sustrato orgánico rico en nutrientes que ha quedado depositado en la cuenca.

La implementación de estas estrategias redundará en favor del desarrollo urbano de la ciudad de Ica, la conservación y re-integración de la biodiversidad en el entorno, la protección del curso fluvial, la limitación de riesgos de que se produzcan desastres naturales causados por la inestabilidad de los taludes ribereños y el desbordamiento del río Ica (con las consecuentes inundaciones de las parcelas circundantes) y, finalmente, la sustitución de los asentamientos humanos precarios existentes a lo largo del cauce, por nuevos parques y espacios públicos, garantizando de esta manera la seguridad de las poblaciones desfavorecidas y su inclusión en los nuevos planeamientos urbanos.